La reacción transfeminista

“Paren, paren, paren”, grita Alma Fernández mientras empuña un megáfono. Es sábado 13 de octubre por la tarde y “las Históricas”, las más viejas que sobrevivieron al transodio y encabezan la enorme columna de la marcha contra los travesticidios que en ese momento encara una calle en pendiente, le hacen caso y frenan. Alma señala al frente: ahí está el lago Nahuel Huapi con un fondo de montañas de picos nevados. “Miren qué hermoso”, dice y varias largan una carcajada, enternecidas.

Ese marco, el de Bariloche-Furilofche, fue el elegido en 2022 para ser sede del hecho político con más volumen de América Latina, el del Encuentro Plurinacional de Mujeres y Disidencias, que este fin de semana, en su edición 36°, reunió a unas 70.000 personas, según datos de la Comisión Organizadora.

La belleza de ese territorio y la riqueza de unos bienes naturales codiciados por empresas de capitales nacionales y transnacionales, tuvieron mucho que ver con esa decisión del movimiento transfeminista. El disparador fue el encarcelamiento de cinco mujeres mapuche luego del violento desalojo de la Lof Lafken Winkul Mapu en Villa Mascardi, en octubre pasado. Entre ellas estaba la machi Betiana Colhuan, autoridad espiritual y medicinal de la comunidad.

Las mujeres liberadas a mediados de año estuvieron presentes durante todo el 36° Encuentro. En el acto de apertura subieron al escenario frente a una multitud que reclamaba por la vuelta de la machi a su rewe (lugar sagrado). “Somos mapuches, resistentes a la frontera impuesta. Estamos vivas gracias a la lucha de nuestros antepasados”, dijo allí Betiana. “Nosotras, las mujeres mapuche, somos territorio y defendemos el territorio. Estamos dispuestas a dar la vida contra las mineras, las petroleras, las forestales y las represas”, agregó. Y resumió con pocas palabras un conflicto histórico: “Usurpadoras nos dicen, de nuestro propio territorio”.

Al otro día, durante la masiva Asamblea de Feministas del Abya Yala que se llevó a cabo en el Centro Cívico haría hincapié en otro reclamo, esta vez dirigido hacia el mismo movimiento: el de que este sea “realmente plurinacional”. En ese sentido, una de las tensiones más fuertes tuvo que ver con la negativa de una parte de la Comisión Organizadora a incluir en el cronograma del encuentro una caminata a la Lof en la que asesinaron a Rafael Nahuel.

“No queremos estar para adornar las fotos, con nuestras vestimentas tradicionales. Queremos que nuestra palabra tenga sentido, que nuestra presencia y nuestros cuerpos tengan sentido”, dijo en esa misma línea una representante de la Confederación Mapuche de Neuquén.

No pasarán

A una semana de las elecciones, casi todas las instancias del Encuentro estuvieron atravesadas por la coyuntura política. Durante el recorrido de la marcha del domingo, que partió desde “el Alto”, una de las zonas más pobres e invisibilizadas de Bariloche, y culminó en el velódromo municipal, se pudo ver la cara de Milei estampada en postes y carteles . “A las derechas les decimos ¡no pasarán!”, o “con fascismo no hay derechos”, eran algunas de las consignas para rematar. También le dedicaron canciones: “Milei es facho, es liberal, es un machito de la casta patriarcal”, coreaban las Socorristas de peluca fucsia.

Con sus matices y tensiones, las que más marcaron la agenda en ese sentido fueron las sindicalistas de las dos CTA y la UTEP -que nuevamente marcharon en un bloque de unidad-, organizaciones como el Movimiento Evita y La Cámpora, y las militantes de los partidos de izquierda, con la candidata a presidenta Myriam Bregman a la cabeza.

“Es muy plural el movimiento feminista pero ahí radica su potencia”, evaluó Clarisa Gambera, Secretaria de Género de ATE Nacional. “Están las elecciones por delante y se armó un debate sobre eso pero claramente acá todo el mundo está diciendo que nunca es con la derecha, que no es con Milei y que no es con Bullrich, y que viene una etapa que puede ser muy peligrosa para nuestro país”, expresó. Para Mercedes Cabezas, Secretaria Adjunta de la misma organización, la unidad que construyeron las sindicalistas debe ser faro para toda la clase trabajadora. “Para pelear por lo que haya que pelear en el tiempo que viene”, señaló.

Victoria Freire, candidata a legisladora por Unión por la Ciudad (CABA), también hizo foco en la importancia de la marcha en este contexto. Así, para afirmar “que somos un movimiento que está vivo, que tiene reivindicaciones, que se encuentra, que se organiza y que vamos a seguir en las calles siempre peleando por nuestros derechos”.

Junto con el de Trabajadoras de Casas Particulares, el taller Antifascista fue una de las novedades de esta edición del Encuentro. Allí el tema electoral, que también fue fuente de disputas, fue desbordado ante un diagnóstico común sobre la gran amenaza que significa el avance de las derechas radicalizadas.

La crisis económica, la inflación, la precarización de la vida, achacadas tanto al macrismo como al peronismo, fueron señaladas como el caldo de cultivo perfecto de ese fenómeno. “¿Cómo ayudamos a esos varones perdidos a construir nuevas masculinidades? Tienen miedo y estos tarados les dan seguridad”, aventuró una sindicalista veterana de Comodoro Rivadavia. Una docente de CABA agregó: “Sobrevivir no alcanza, hay que encontrar otras formas de hacer política”. Y una piba no binaria sumó: “Parece que hay cosas que ya no se pueden discutir, como que no hay que pagarle al FMI. Los transfeminismos somos un espacio donde esas discusiones se pueden dar, pero no en una entelequia, tienen que haber condiciones de posibilidad”, sostuvo.

La Campaña por el Derechos al Aborto Legal, Seguro y Gratuito fue traída como ejemplo de lo posible: “¿Cómo volvemos a generar esa unidad?”, se escuchó. “Hay que seguir construyendo más allá de lo electoral”, respondió una y otra agregó: “La discusión se disuelve si nos quedamos en sí hay que votar o no a Massa. Hay que encontrar puntos en común y radicalizar la imaginación”. Finalmente, con la venia de las cinco comisiones se consensuó armar una Coordinadora Transfeminista y Antifascista, de carácter federal, que ya está en marcha.

Jujuy, próxima sede

“La sede del 37 encuentro nos convoca luego del jujeñazo”, gritó la representante de la Multisectorial de Mujeres y Disidencias de esa provincia, al presentar en el acto de cierre su propuesta para el Encuentro de 2024.

Se refería a la histórica lucha que en junio se convirtió en estallido luego de que al reclamo docente se plegaran estatales y comunidades originarias ante el avance de una reforma constitucional regresiva e inconsulta, impulsada por el gobernador y entonces precandidato a vicepresidente por Juntos por el Cambio, Gerardo Morales.

“Desde Abra Pampa hasta San Salvador de Jujuy, pasando por Purmamarca, la represión ilegal se cobró los ojos de nuestros hermanos. La pulseada por nuestras libertades fue constante y sin pausa. Arrancamos la libertad de casi 100 detenidos y detenidas pero seguimos enfrentando infames causas penales y contravencionales que pretenden intimidar y desarticular el movimiento popular, como lo hacen desde hace 8 años con Milagro Salas”, denunció la comitiva.

“Jujuy es la resistencia y la esperanza ante el despojo de nuestros recursos naturales, el avance sobre los territorios, el congelamiento de nuestros salarios y la pobreza cada vez más profunda y extensa”, expresaron. Y convocaron a acompañar “la lucha constante de las mujeres contra las violencias y los femicidios” y “por nuestros derechos democráticos enfrentando los avances represivos y de derecha”.

“Las invitamos a Jujuy donde las comunidades nos enseñaron que el agua vale más que el litio y aún sostienen el Tercer Malón de la Paz”, exclamaron ante el vitoreo extendido de las encuentreras, que por ovación definieron que el canto simple y sabio que recorrió estos tres días Bariloche también sería escuchado en Jujuy: “Quisiera tomar agüita, de los valles, de las yungas, de los cerros de la puna”.